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Aunque presenta lesiones en un ojo y su defensor pidió una medida cautelar diferente, Cruz Bladimir Aráuz Úbeda debe permanecer preso mientras enfrenta un proceso en Matagalpa, donde la Fiscalía lo acusó por el asesinato de Jelvin Ochoa Lanzas, de 20 años, ocurrido en una comunidad del municipio de Matiguás.
Durante la audiencia preliminar, la titular del Juzgado Único de Distrito Penal de Audiencias en Matagalpa, Josefina Vásquez, admitió la acusación contra Aráuz Úbeda, a quien impuso la medida cautelar de prisión preventiva.
En ese caso, la Fiscalía también acusó como presunto coautor del crimen a Edwin Bladimir Aráuz Castillo, de 29 años, quien está prófugo y es buscado por las autoridades policiales.
De acuerdo con la acusación sostenida en la audiencia por el fiscal auxiliar Walter Urbina, el crimen ocurrió a las 7:00 p.m. del 25 de marzo recién pasado, frente a la filial de la Alcaldía de Matiguás, en la comunidad Cerro Colorado.
Ochoa Lanzas, quien trabajaba en una zona franca en Sébaco, caminaba con Marvin Antonio Hernández Martínez y Omar Enrique Arvizú Ochoa hacia sus casas en la vecina comunidad El Laberinto.
Mientras tanto, los Aráuz —que según acusación iban “en aparente estado de ebriedad”—, pasaban por el lugar en una camioneta que manejaba Edwin, quien comenzó a sonar la bocina del vehículo para que los peatones se apartaran.
Ofensas y ataques
Pocos metros después, Edwin presuntamente estacionó la camioneta y bajó con un revólver calibre 38 en la mano, gritando ofensas a los jóvenes, mientras que su padre bajó y sin mediar palabras atacó a Ochoa lanzándole puñetazos.
Para defenderse —dice la acusación— Ochoa tomó una piedra con la que asestó un golpe en el ojo a Aráuz Úbeda y el hijo de este, a menos de un metro de distancia, le disparó impactándole un tiro en el pecho.
Ochoa cayó de rodillas, agarrándose el pecho y Aráuz Úbeda habría aprovechado para asestarle una patada y luego sujetarlo para estrellarlo contra el suelo en tres ocasiones. Acto seguido, padre e hijo se fueron del lugar en el vehículo.
Darlin Antonio Obando, defensor de Aráuz Úbeda, cuestionó la acusación así como un dictamen médico ofrecido como prueba en el proceso, pero que “fue hecho por un médico que no se ha graduado y que apenas está haciendo su servicio social”.
Además —según Obando— el dictamen omite cuál fue la causa de muerte de Ochoa y “no se dice si al final el disparo fue la causa directa” y tampoco establece si el cuerpo de la víctima tenía golpes o escoriaciones producto de golpes.
También alegó que su representado “no participó en un solo acto que produjera el resultado (la muerte de Ochoa)”.
La audiencia inicial contra Cruz Bladimir Aráuz Úbeda fue programada para el 10 de abril.
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