“Misericordiosos como el Padre y la Madre”, coreaban más de treinta mil personas que este viernes 15 de enero asistieron a la misa presidida por el obispo de la Diócesis de Matagalpa, monseñor Rolando José Álvarez Lagos, en honor de Nuestro Señor de Esquipulas, patrono del municipio de Esquipulas.
La mayoría llegó el día antes, caminando en promedio 18 kilómetros desde comunidades de tres municipios vecinos. Otros llegaron a la misa que el obispo presidió junto con todo el clero diocesano y luego la multitud recorrió las principales calles de la pequeña ciudad de Esquipulas, en procesión con la imagen del llamado Cristo Negro.
“En este Año Jubilar de la Misericordia, que Dios pueda decir también, sobre cada uno de ustedes: ‘Este es mi hijo amado en quien yo encuentro mis complacencias, mis alegrías, en quien me complazco’, porque habrá visto en nuestro corazón un corazón misericordioso y generoso”, fue una de las exhortaciones del obispo Álvarez en su sermón.
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Además el prelado presentó al clero que dirige un plan pastoral para ejecutar este año en cada parroquia de la Diócesis y pidió a los feligreses que oren por él.
Mientras, en Siuna, también se pudo observar a centenares de fieles católicos que asistieron a la procesión del señor de Esquipulas.
Monseñor David Zewick, obispo auxiliar del Vicariato de Bluefields, en el Caribe Norte, anunció que el sacerdote Jairo Salazar, originario de Kukra Hill, acompañará al sacerdote Santos Osejeda, párroco de Siuna, en la Diócesis.
Luis Eduardo Martínez M. y José Garth, LA PRENSA, 16 de enero de 2016
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