“El Presidente de la Republica me llamó el día de ayer y a través de doña Rosario, me comunicó que después de un análisis objetivo, en el que tomaron en cuenta el impacto social, los riesgos y beneficios, la particularidad del municipio, su productividad, el modo de vida de los ranchograndeños y el cuido al medio ambiente, orientó a Marena y a través de esta institución declaraba no viable la minería en Rancho Grande”.
“Creemos que ésta es una decisión sabia del gobierno y en la que se manifiesta que en este caso se respetó la voluntad de la población y se escuchó el clamor popular de los pobladores. Yo mismo agradecí al presidente en nombre de todo el pueblo de Rancho Grande, del clero de la Diócesis y del mío, la decisión y obviamente hemos ponderado muy bien dicha decisión”.
Agradecemos a todos nuestros fieles por sus oraciones y pedimos la intercesión de Nuestra Señora de Fátima.
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