Luis Humberto Cruz Cruz, de 30 años, fue sentenciado a 17 años de prisión por homicidio y homicidio en grado de frustración en perjuicio del productor Melvin Ramón Pineda Pineda y la esposa de este, Jackeline Araceli Salgado Reyes, respectivamente.
El titular del Juzgado Segundo de Distrito Penal de Juicios de Jinotega, Erick Carvajal, estableció en 11 años de prisión la condena por el homicidio de Pineda y en seis años de prisión por el homicidio frustrado, penas que Cruz debe cumplir de manera sucesiva en el Sistema Penitenciario Regional de Waswalí, ubicado a 5 kilómetros al suroeste de la ciudad de Matagalpa.
La condena, determinó el juez, expirará el 27 de febrero de 2036, aunque dejó a salvo el derecho de las partes para apelar de la sentencia.
Según el expediente judicial, Cruz y otro hombre con características físicas de un adolescente, habrían atacado a machetazos a Pineda, de 35 años y su esposa de 27, el pasado 8 de enero en la casa de la pareja en la comunidad El Golfo, al sur de la cabecera municipal de El Cuá.
Platicaron durante 15 minutos
Cruz y el otro sujeto, todavía prófugo y sin identificar, llegaron a la vivienda y estuvieron platicando durante aproximadamente 15 minutos sobre trabajos que Pineda pretendía realizar en su propiedad y este pidió a Salgado que les diera de cenar.
En el proceso, la Fiscalía había calificado los hechos como asesinato agravado y asesinato en grado de frustración, sosteniendo que los hombres tenían “planes plenamente distribuidos” y, en el corredor de la casa, Cruz tomó un machete en cada mano y atacó a Pineda, hiriéndolo en distintas partes. Al ver la agresión, Salgado fue a la sala de donde tomó una coba pretendiendo defender a su pareja, pero el desconocido la sujetó y desarmó.
Cruz también atacó a la mujer macheteándola en las manos y barbilla, pero ella cayó e intentó ocultarse debajo de un camarote de madera.
Según la acusación, Cruz metió el machete por una hendija y provocó varias heridas más a Salgado; mientras que Pineda aprovechó y logró llegar a un cuarto en el que se encerró con el niño, pidiéndole a los agresores que no los mataran y que se llevaran un motor y una lavadora que tenía en la casa.
Trasladados al centro de salud de El Cuá
Los hombres abrieron el cuarto y Pineda corrió al sur de la casa, pero lo alcanzaron y terminaron de matarlo a machetazos. Acto seguido, los agresores volvieron a la vivienda apoderándose de un celular con un protector verde y una cartera, antes de huir del sitio.
Más tarde, Salgado logró llegar a la casa de un vecino, de donde la llevaron al centro de salud de El Cuá.
En el juicio declararon cinco testigos propuestos por la defensa, así como el propio acusado que negó su participación en los hechos. Las versiones de descargo indicaban que ese día Cruz estaba trabajando en la propiedad de Marvin Pineda Benavides.
La Fiscalía también acusaba a Cruz por robo agravado, pero el juez consideró que “no se demostró que el acusado y el sujeto de identidad desconocida se hayan apoderado de los bienes descritos en la acusación”.
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