Los Toros de Herrera, en representación de Panamá, se coronaron Campeones de la LXI Serie del Caribe, al derrotar 3 x 1 a los Leñadores de Cuba.
Panamá inició con el pie derecho desde el primer episodio: Jilton Calderón conectó doble y Allen Córdoba, conectó un sencillo al jardín izquierdo y el nicaragüense anotó la primera carrera. Luego Elmer Reyes empujó la segunda rayita de los «Toros», trayendo a Córdoba al pentágono.
Harold Aráuz se trenzó en duelo con Asiel Álvarez, quien reaccionó al mal inicio. Pero Cuba anotó en el quinto por doble de Alfredo Despaigne y sencillo de Carlos Benítez, para ajustar el marcador a 1-2.
Panamá fabricó la última anotación después de dos outs en la séptima. Jonathan Galvez conectó doble que explotó a Álvarez y el relevista Vladimir García cometió un wildpitch, antes de admitir un sencillo productor de Rodrigo Vigil.
Nada menos que 59 años debieron pasar para que Panamá volviera a reinar en la Serie del Caribe.
Para los clubes de Panamá esta representó la segunda coronación en estas lides regionales, tras subir al trono también en la edición de San Juan-1950, por intermedio de los Carta Blanca Yankees.
La escuadra canalera, dirigida por Manuel Rodríguez, lideró el grupo B con balance de 3-1 antes de meterse a la gran final, en la cual superó a los Leñadores en un duelo cerrado de principio a fin.
Los Toros de Herrera sucedieron en el trono del certamen a los puertorriqueños Criollos de Caguas, titulares en 2017 y 2018.
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