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Afortunadamente, el perro consiguió salir vivo tras atacar a los yihadistas y salvar la vida de sus compañeros combatientes en Irak.
Según informa el medio inglés The Sun, la operación militar tuvo lugar hace un mes en la frontera kurda. Al parecer, los soldados de las fuerzas especiales británicas volvían de un entrenamiento de diez días y con ellos se encontraba el pastor alemán.
Durante el viaje de vuelta las tropas se vieron atrapadas por un grupo de yihadistas. El convoy fue atacado por bombas mientras les rodeaba un grupo 50 miembros de Daesh.
Los militares británicos se vieron divididos en tres áreas, pero los yihadistas no repararon en el perro que iba con ellos. El pastor alemán corrió hacia los terroristas furioso.
El primer yihadista fue mordido en el cuello y en la cara; el segundo en la pierna y en el brazo. Los dos salieron corriendo tras el ataque salvaje que habían sufrido.
Según explicó una fuente al Daily Star Sunday «los perros militares a veces acompañan a las fuerzas especiales en las operaciones. El pastor alemán estaba de entrenamiento, pero cuando las fuerzas se vieron bajo fuego enemigo el animal quiso proteger a sus tropas sin considerar su propia seguridad.
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