El 2 de mayo continuará el juicio que en Jinotega enfrenta Beker Nahum Centeno Álvarez, por el asesinato agravado de su cuñado César Augusto Orozco Rocha, a quien asestó al menos cuatro machetazos, el pasado 22 de enero en la comunidad Aguas Zarcas Arriba del municipio de San José de Bocay, departamento de Jinotega.
El juicio inició la tarde del 9 de abril recién pasado, pero ninguno de los testigos propuestos por la Fiscalía llegó a la audiencia, por lo que el Juez Primero de Distrito Penal de Juicios de Jinotega, Róger Espinoza, solo escuchó los alegatos de apertura de la Fiscalía y la defensa para decretar la suspensión.
En su alegato, la fiscal auxiliar María Olivas dijo que demostrará en juicio que Centeno actuó “con alevosía” y cometió el asesinato “en presencia de un niño y varios testigos”.
Por su parte, la defensora pública Julieth Molina, aseguró que los hechos no sucedieron como los planteó la Fiscalía, que el “agresivo” fue presuntamente Orozco, por lo que Centeno habría actuado en legítima defensa y “demostraré la inocencia de mi defendido”, según el acta del comienzo del juicio.
La versión de la Fiscalía que es que el 22 de enero Orozco y su pareja Yolanda de Jesús Centeno Álvarez discutían en un cuarto, pero el hombre tomó una coba o macana y amenazó a la mujer con asesinarla si ella se iba donde su mamá, al tiempo que con una mano la sujetaba del cuello.
Dos hijos de Yolanda intervinieron y desarmaron a Orozco, pero este se fue a la cocina a buscar una cutacha. La mujer corrió a esconderse a una letrina. En ese momento, apunta la Fiscalía, Beker le dijo a su cuñado que se controlara, pero este respondió con frases soeces.
Cuando Orozco se disponía a agarrar la cutacha detrás de una hornilla, Beker “con alevosía y plena intención de privar de la vida” a su cuñado, y en presencia de Elmer Blandón Dormus y un niño, le asestó dos machetazos en los hombros y un tercero en la cabeza.
Suscríbase a nuestro Canal de YouTube
Según la Fiscalía, Orozco rogó a su cuñado que no lo matara y que le diera café y agua; pero, Beker se fue a su cuarto por más de media hora.
A las 10:20 de la noche, Beker regresó a la cocina y “aumentando deliberadamente el sufrimiento de la víctima estando aún vivo, con alevosía, ensañamiento”, y en presencia de Blandón y el niño, asestó un cuarto machetazo a Orozco en el cuello, provocándole la muerte.
“Seguidamente el acusado se dio a la fuga del lugar”, detalla la Fiscalía.
Facebook Comments