Pedro José Gutiérrez González, originario de Jinotega y uno de los 135 presos políticos excarcelados y desterrados hacia Guatemala, denunció que el obispo de Matagalpa, monseñor Rolando José Álvarez Lagos, fue dopado durante al menos 15 días en el Sistema Penitenciario Jorge Navarro, conocido como «La Modelo», para silenciarlo y evitar que continuara con sus protestas contra los carceleros.
De acuerdo con el testimonio que Gutiérrez González ofreció a Mosaico CSI, el obispo de Matagalpa estuvo encerrado en el área de máxima seguridad conocida como “el infiernillo” en La Modelo, mientras que a él lo encerraron en esa misma área, pero en una celda al frente de la que estaba el jerarca católico.
Según el excarcelado, la postura firme del obispo ante sus captores fue tan desafiante que los carceleros decidieron doparlo para callarlo, manteniéndolo así por lo menos durante dos semanas, al principio de su encierro en La Modelo, en febrero de 2023.
Antes de ser encarcelado en La Modelo, monseñor Álvarez estuvo recluido 15 días en la Residencia Episcopal de Matagalpa, entre el 4 y el 19 de agosto de 2022. En esta última fecha, la Policía ejecutó un descomunal operativo para sustraerlo y llevarlo a Managua, forzándolo a estar encerrado y aislado en su casa familiar, hasta el 9 de febrero de 2023, cuando el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo desterró a 222 presos políticos, enviándolos a Estados Unidos.
Ortega dijo ese día que el obispo de Matagalpa se habría negado a subir al avión, por lo que decidió mandarlo a La Modelo. El 10 de febrero, monseñor Álvarez fue sentenciado, sin juicio, a 26 años y 4 meses de prisión, además de 210 días multa, equivalentes a 56,461.15 córdobas.
Ese mismo día, Rosario en mano, Gutiérrez se fue a la zona conocida como La Miguel Gutiérrez en Managua, y publicó un video en el que demandaba la liberación del obispo de Matagalpa. Al siguiente día fue encarcelado y el domingo 12 de febrero fue llevado al “infiernillo”, en La Modelo, y “de inmediato supe que monseñor estaba allí”.
“Permanecí tres meses enchachado, esposado las 24 horas, en una celda solo con una luz encendida… al llegar allí me percaté de que estaba monseñor Rolando Álvarez en la celda de enfrente, escuchaba su voz, escuchaba su protesta, (es) un hombre muy fuerte”, revela Gutiérrez.
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Agrega que el jerarca católico “me inspiró fortaleza al escucharlo con aquella voz potente, con aquellas agallas de un verdadero guerrero nicaragüense, de un verdadero religioso diciéndole a los guardias que eran cobardes, que lo tenían allí por cobardes, y él los enfrentó. Eso duró como dos días. Monseñor no paraba de decirles. Al tercer día ya lo estaban dopando, le estaban suministrando algún tipo de droga, porque lo silenciaron totalmente”.
Al menos dos o tres custodios estaban siempre a la puerta de la celda del obispo, dice Gutiérrez González, a los que lograba ver por una hendija, auxiliado con una botella con agua. “Cada diez minutos, aproximadamente, entraban médicos a verlo”, sostiene el excarcelado político.
Esa situación duró al menos 15 días, asegura Gutiérrez González, hasta que el obispo de Matagalpa fue llevado a otro sitio. “No supe más de él”, afirma.
El régimen, a través de sus medios de propaganda, mostró imágenes del obispo el 25 de marzo de 2023, durante una visita de sus hermanos Vilma y Manuel Álvarez Lagos, en un escenario decorado en La Modelo.
Gutiérrez González cumplió tres meses en la celda de máxima seguridad, y solo lo sacaron porque en esa área hallaron muerto a un reo común, al que no conoció, y que estaba con esposas y grilletes. Al siguiente día, él fue trasladado a la celda 64 de la llamada Galería Uno. Era mayo de 2023.
Luego, el 28 de noviembre, de 2023, el régimen publicó una serie de fotos y un video del obispo de Matagalpa durante supuestas visitas familiares y atenciones médicas. Después, el 2 de enero de 2024, mostró más fotos del obispo recibiendo atención médica, pero bajo vigilancia policial.
El 13 de enero, el obispo Álvarez junto al obispo de Siuna, monseñor Isidoro Mora, 15 sacerdotes y dos seminaristas, fueron desterrados y enviados a Roma.
Monseñor Álvarez, quien antes de su encierro era muy activo en redes sociales, se ha mantenido silente, sin brindar declaraciones públicas.
Este 5 de septiembre, 135 presos políticos, incluyendo a Gutiérrez González, fueron desterrados y enviados a Guatemala.
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