Leyla Stela Moreno de Montenegro nació el 03 de agosto de 1952. Hija de José Santos Moreno y Pastorcita Herrera. Inició sus estudios en la Escuela Superior de Niñas Rubén Darío, dirigida por la eminente maestra Amanda López Pineda, quien cultivó en ella el gusto por la poesía y la declamación.
A partir de segundo grado, comenzó a estudiar en el Colegio Sagrado Corazón de Jesús. Se bachilleró con honores en el Instituto Nacional Benjamín Zeledón en 1969. De manera simultánea, obtuvo su título como Maestra de Educación Primaria en la Escuela Normal Nocturna de Jinotega. Inició labores en la Escuela Nuclear Alfredo Alegría Rosales.
En 1973 contrajo matrimonio con Francisco Montenegro García. Trabajó en la Escuela Gabriela Mistral y en el Instituto Profesora Esmilda de Vásquez. Ingresó a la UNAN-Managua y obtuvo su título como licenciada en Ciencias de la Educación con especialidad en Ciencias Naturales y Biología. Con el afán de mejorar su formación, realizó posgrados en Psicopedagogía y Recursos Humanos.
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En la época de la Revolución fue nombrada subdirectora del Instituto Nacional Benjamín Zeledón. Fue pionera del Movimiento Pedagógico que dio origen a los TEPCE.
La maestra Leyla ha ocupado en dos ocasiones la Delegación Municipal de Jinotega, en 1983 y 1989. En 1986 fue nombrada directora del Instituto Nocturno Augusto César Sandino.
En 1991 trabajó junto al maestro Harvey Wells en la Escuela Normal. Se graduó como licenciada en Derecho en la UPONIC-Matagalpa en 1995. Posteriormente, la Corte Suprema de Justicia la certificó como abogada y Notaria Pública.
Su espíritu incansable en favor de la educación la llevó a fundar en 1996 el Instituto Amanda López Pineda, que tuvo una duración de 12 años y contó con un personal calificado. Paralelamente, en el mismo año creó en Jinotega la Delegación Departamental de la Universidad Popular de Nicaragua-UPONIC. Se desempeñó además como catedrática universitaria.
En el año 2007 fue nombrada para asumir la Delegación Departamental de Educación. Después de haber bregado con las dificultades de la vida y el trabajo, se jubiló pletórica en el año 2011, después de haber servido incondicionalmente como formadora de generaciones y como luchadora férrea de los derechos magisteriales.
Hoy, la profesora Leyla se dedica a atender a su esposo y a sus hijos. Justo mérito en estas líneas a su señor esposo, el doctor Francisco Montenegro García, abogado y Notario Público, quien ha testificado su amor por Jinotega en las cuerdas de una guitarra y una mandolina, desplegando notas sublimes al viento con sones de polcas y mazurcas. Aquellos signos intrépidos al viento siempre llevan impregnados el rumor de los pinos y el amor por Jinotega.
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