El Ministerio Público acusó en Matagalpa a siete personas –incluidas dos mujeres– por el robo agravado de un poco más de 20 millones de córdobas a la familia del comerciante de ganado Gerónimo Porfirio Calero Dávila, de 73 años. Del dinero, la Policía dice que pudo recuperar únicamente un poco más 3.4 millones de córdobas.
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En uno de sus informes de autoelogio ante medios oficialistas, el jefe departamental de la Policía en Matagalpa, Diego Baltodano, presentó a Amado Felipe Martínez, de 52 años; Francisco Castillo Escoto, de 50; Harvin Antonio Tórrez Montenegro, de 33; Leyder Isael González Amador, de 21; y Jasmina Yoconda Valle Castro, de 34; como sospechosos del robo registrado el 7 de julio recién pasado en Paiwas.
Además de ellos, la Fiscalía acusó como coautores del robo a Adela Martínez Díaz –quien también es conocida como Flora Azucena Palacios– de edad imprecisa; y Léster Guillermo González García, de 41 años, quienes están prófugos. Ambos habrían planificado el atraco desde abril recién pasado.
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Conforme el plan, sostiene la Fiscalía, Martínez Díaz llegó el 12 de abril a la casa de Calero Dávila para pedir empleo y desde esa misma fecha comenzó a trabajar como asistente del hogar, consiguiendo información sobre el lugar donde su empleador guardaba el dinero.
El 7 de julio reciente, González García, Amado Martínez y un desconocido, en una camioneta con placa M 344661 que manejaba Castillo Escoto, llegaron a la propiedad de Calero Dávila, 75 metros al sur de la Alcaldía de Paiwas en el poblado de Ubú Norte, y Martínez Díaz abrió la puerta para que ingresaran.
Los hombres entraron al cuarto donde Calero Dávila dormía con Venancia del Carmen Rodríguez Meza, de 81 años; y al cuarto de Héctor Gerónimo Calero Sándigo, de 22, intimidándolos con armas de fuego tipo revólver.
A Calero Dávila le robaron 56,000 córdobas y 70 dólares en efectivo que tenía en una billetera y 3,900 córdobas que andaba en el bolsillo, mientras que, de una mesa, sustrajeron 20 millones de córdobas que estaban en bolsas de papel. Martínez Díaz aprovechó y en las bolsas de dinero metió varias prendas, incluyendo pulseras, cadenas y relojes.
El 12 de julio, dice la Policía que Castillo Escoto y Tórrez Montenegro iban en la camioneta en el municipio de Matiguás, departamento de Matagalpa, y querían esconder 2,397,800 córdobas.
Ese mismo día fue allanada la casa de Amado Martínez en Ubú Norte, Paiwas, donde estaba su esposa Valle Castro, a quien le incautaron 395,000 córdobas.
Otro allanamiento fue ese día en la casa del prófugo González García, en una comunidad de Matiguás, donde estaba González Amador, a quien le incautaron 65,000 córdobas y un revólver.
La acusación de la Fiscalía asegura que los 3,402,870 córdobas “recuperados” fueron entregados el mismo 12 de julio a Calero Dávila.
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