El Papa Francisco consideró que Daniel Ortega tendría algún tipo de “desequilibrio” y comparó a la de Nicaragua con las dictaduras de Lenin y Hitler, calificándola como “guaranga”. Además, afirmó que el obispo de Matagalpa, monseñor Rolando José Álvarez Lagos “quiso dar su testimonio y no aceptó el exilio”, por lo que sigue preso.
Le puede interesar: Día Internacional de la Mujer, más de un siglo de luchas
Las declaraciones del Papa surgieron en una entrevista que brindó a Daniel Hadad, director del medio argentino Infobae.
“La segunda pregunta tiene que ver con Nicaragua. En un primer momento parecía tomársela solamente con los opositores o con aquellos que pensaban diferente; de hecho, acaban de expulsar al destierro a 222 opositores. Pero también veo un ataque muy fuerte a la iglesia católica: echaron al Nuncio, ahora prohíben las procesiones de Semana Santa. Y una frase del mandatario diciendo: ‘los obispos, los curas, los papas, son una mafia’. ¿Qué piensa de esto?”, consultó Hadad al Sumo Pontífice.
También puede leer: Cáritas de Nicaragua cancelada por el régimen
El Papa Francisco respondió: “Yo ahí, con mucho respeto, no me queda otra que pensar en un desequilibrio de la persona que dirige (Daniel Ortega). Ahí tenemos un obispo preso, un hombre muy serio, muy capaz. Quiso dar su testimonio y no aceptó el exilio. Es una cosa que está fuera de lo que estamos viviendo, es como si fuera traer de dictaduras del ’17 (1917, Lenin), comunistas o hitlerianas del 35, traer aquí las mismas. Son un tipo de dictaduras groseras, o para usar una distinción linda de Argentina, guarangas”, guarangas”.
Monseñor Álvarez lleva un poco más de 7 meses en cautiverio. El 4 de agosto de 2022 junto a 11 personas más, incluyendo sacerdotes, seminaristas y laicos, la Policía lo forzó a un encierro en la Residencia Episcopal de Matagalpa.
Tres laicos y un sacerdote fueron liberados en días distintos, pero, el 19 de agosto, el obispo fue trasladado a su casa, mientras que 3 sacerdotes, 1 diácono, 2 seminaristas y 1 reportero gráfico fueron encerrados en la cárcel de El Chipote en Managua.
Posteriormente, en un cuestionado proceso, los sacerdotes Ramiro Reynaldo Tijerino Chávez, Sadiel Antonio Eugarrios Cano y José Luis Díaz Cruz, además del diácono Raúl Antonio Vega González, los seminaristas Darvin Esteylin Leiva Mendoza y Melkin Antonio Centeno Sequeira, y el reportero gráfico Sergio José Cárdenas Flores, fueron sentenciados a 10 años de prisión y 800 días multa.
Solo tres días después, el régimen de Ortega los desterró junto a otros 215 presos políticos que envió a Estados Unidos el 9 de febrero. Monseñor Álvarez se habría negado a abordar el avión y ese mismo día fue encarcelado en La Modelo, reveló Ortega.
El 10 de febrero, sin juicio conocido, monseñor Álvarez fue sentenciado a 26 años y 4 meses de prisión más 210 días multas por falsos cargos de «conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional y propagación de noticias falsas a través de las tecnologías de la información y la comunicación en perjuicio del Estado y la sociedad nicaragüenses».
Facebook Comments