En la madrugada de este lunes 13 de febrero, a Fray Damián Muratori lo vieron partir del Santuario Franciscano El Tepeyac, en San Rafael del Norte, Jinotega. Salió en el vehículo de la parroquia para estar puntual en una cita a las 8:00 de la mañana en la Dirección General de Migración y Extranjería (DGME) del Ministerio de Gobernación en Managua.
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Nada más han sabido en San Rafael del Norte sobre el paradero del sacerdote franciscano, a quien la noche del domingo 12 de febrero llegaron en un carro de la DGME a entregarle la cita. “Tenemos miedo de que lo vayan a expulsar del país, como han corrido a otra gente, incluso a otros padres (sacerdotes)”, señala una feligresa.
Mientras tanto, en el Santuario, una persona sin identificarse solo dijo que Fray Damián “no se encuentra en este momento… tengo orientación de no brindar más información al respecto”.
A las 5:00 p.m. de este 13 de febrero, seguían sin noticias de Fray Damián. “Esperemos que Fray Odorico haga el milagro y no lo saquen del país”, dijo un católico que prefiere omitir su nombre porque “después lo meten preso a uno también”.
Fray Damián, quien está por cumplir 52 años de vida sacerdotal, llegó a Nicaragua el 14 de marzo de 1976 y estuvo como misionero en el municipio matagalpino de Matiguás. Desde entonces, ha destacado en múltiples obras sociales, además de ser el vicepostulador de la causa de canonización de Fray Odorico D’Andrea, a quien los católicos llaman “el santito de San Rafael”.
Horas antes de que le llevaran la cita de la DGME, Fray Damián presidió una misa en el Santuario -en el que es rector desde el año 2000- y se refirió a la situación de cárcel de monseñor Rolando José Álvarez Lagos, obispo de la Diócesis de Matagalpa y Administrador Apostólico de la Diócesis de Estelí.
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“Nos vamos a reunir en oración no solamente por nosotros, sino por todos los nicaragüenses en todo el mundo, por los sacerdotes y también ciudadanos que han salido de Nicaragua forzadamente, y oremos también por monseñor Álvarez que está en la cárcel, 26 años de cárcel, para que él sea valiente y nos enseñe a ser realmente nicaragüenses leales, coherentes y orgullosos de ser nicaragüenses”, dijo Fray Damián al ofrecer la celebración litúrgica dominical.
Mientras que, en la homilía, el sacerdote disertó enérgico sobre el libre albedrío, porque Dios a nadie obliga para cumplir los Mandamientos, ya que “es el Dios de la libertad y por eso no viola nunca la libertad de nadie, entonces cada uno de nosotros somos lo que queremos ser”.
Además, consideró el encarcelamiento de monseñor Álvarez, sentenciado a 26 años y 4 meses de prisión, como “un hecho histórico” y apuntó que el obispo “estaba en la lista de los que tenían que ir a Estados Unidos. ¿Se fue monseñor Álvarez? ¿Por qué no se fue? ¡Porque no quiso!… Al final, 220 personas agarraron el avión y uno no lo agarra. ¿Tenía razón monseñor Álvarez? … Se quedó y para mí, un verdadero hombre con pantalón… Me echan preso, échenme preso…”.
“Él sabía que no agarrando el avión le iban a caer montón de años…”, señaló Fray Damián, advirtiendo que la Palabra dominical llama a asumir las consecuencias de las decisiones.
Fray Damián tenía residencia permanente en Nicaragua, pero debía renovarla anualmente. Sin embargo, en mayo de 2021, la DGME le canceló la residencia y el religioso debe estar renovando su estadía en el país cada tres meses.
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