A pesar del hostigamiento policial del que ha sido víctima, el obispo de la Diócesis de Matagalpa y Administrador Apostólico de la Diócesis de Estelí, monseñor Rolando José Álvarez Lagos, retomó sus actividades pastorales y este martes 24 de mayo presidió una misa en el templo San Isidro Labrador, perteneciente a la parroquia María Auxiliadora en Las Sabanas, municipio de San José de Cusmapa, departamento de Madriz, jurisdicción de la Diócesis de Estelí.
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En la ceremonia, monseñor Álvarez ordenó sacerdote al diácono Orlan Antonio López Ramírez, quien se convierte en el primer presbítero originario de la comunidad Las Sabanas.
Mientras monseñor Álvarez estuvo de gira pastoral, la Policía despejó los dispositivos de vigilancia y hostigamiento que mantuvo afuera de la Residencia Episcopal en pleno centro de la ciudad de Matagalpa.
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Debido al hostigamiento policial que el jueves 19 de mayo alcanzó al círculo familiar de monseñor Álvarez en Managua, este decidió refugiarse esa noche en la Parroquia Santo Cristo de Las Colinas, donde inició una jornada de ayuno y oración al que se sumaron feligreses en todas las parroquias de las Diócesis de Matagalpa y Estelí, así como de otras partes del país.
La mañana de este lunes 23 de mayo, monseñor Álvarez se trasladó a Matagalpa y la Policía mantuvo rodeada la Residencia Episcopal.
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De momento, sigue sin trascender si monseñor Álvarez mantendrá la jornada de ayuno. En la mañana de este martes, día de María Auxiliadora, desde la capilla de la Residencia Episcopal, el obispo inició el rezo de «Mil Avemarías por Nicaragua y este momento de gracia que vivimos».
El obispo Álvarez destaca por sus frecuentes visitas pastorales a cada parroquia de las Diócesis que atiende. En Matagalpa ha visitado cada una de las 630 comunidades rurales que comprende la jurisdicción eclesiástica.
En desarrollo…
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