Denunciando que continúan amenazándolo, el padre Vicente Martínez, titular de la Parroquia Santa Lucía en el municipio de Darío, Matagalpa, insistió en llamar a los nicaragüenses a que eviten participar en las votaciones del domingo 7 de noviembre próximo, las cuales califica como un “circo electoral”.
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Además, el padre Vicente consideró que nada está normal en Nicaragua, señalando que incluso sandinistas están emigrando y que los costos de la canasta básica y medicinas siguen incrementando en el país.
Antes de impartir la bendición, al final de la misa que presidió este domingo 31 de octubre, el religioso explicó que “debido a estas cosas que yo he dicho de denuncias por el circo electoral que se va a dar el próximo domingo, que he invitado al pueblo que no participe, he recibido muchas amenazas”.
“Incluso, muchos sacerdotes, muchos laicos me dicen: ‘Cállese, se está quemando solo’. En ningún momento, les digo yo, ‘yo no me estoy quemando solo, está Dios conmigo, está mi obispo conmigo, y está mi pueblo, por lo tanto, no estoy solo’, y les vuelvo y les repito que no se presten a este circo electoral, es una falsedad”, agregó el padre Vicente.
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A criterio del sacerdote, ni siquiera debería haber votaciones, por cuanto “se va a gastar todo el dinero del pueblo y en lo mismo vamos a quedar, eso digo yo, hermanos, y se los digo con seguridad, recuérdense que prefiero ser piedra en el zapato de mucha gente y no almohada para que duerman en su pecado, recuérdense que un verdadero católico, un verdadero nicaragüense, un verdadero patriota, no se va a prestar para ese circo”.
“Nosotros ya sabemos cómo está preparado todo, ya sabemos, como les dije, quiénes van a ganar, quiénes van a perder, quiénes son los que van a seguir mangoneando y desangrando nuestro pueblo”, continuó el padre Vicente, indicando que “yo hablo porque vivo la realidad del pueblo”.
El sacerdote señaló que exempleados de la municipalidad y dependencias estatales, así como “hijos de sandinistas”, han tenido que emigrar y “díganme si eso es normal, que a un país le suceda esto, que estemos viviendo esta realidad, que esté normal el país, no, el país no está normal, recuerden que Nicaragua va mal, no hay democracia, no hay derechos humanos, no hay libertad de expresión, y vos no podés decir nada”.
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“Me decía la gente del campo: ‘padre, es que no hay por quién votar, no hay competencia, no hay buenos líderes y entonces qué vamos a ir a hacer’. Entonces, nos vamos a quedar en las casas, nos vamos a quedar orando (…) oremos nada más, porque recuérdense que, democráticamente, no se puede hacer nada por Nicaragua, desgraciadamente los poderosos cuidan su poder, cuidan su dinero, no les importa el pueblo, no les importa que nuestra gente emigre, no le importa que la canasta básica se eleve cada día, no le importa que la medicina, todo, esté caro. Si en verdad amarán al pueblo, esta gente fuera como el rey de Nínive que dice: ‘me bajaré de mi trono, ya no le voy a seguir haciendo más daño a este pueblo, por lo tanto, hasta aquí voy a llegar’. Eso es humildad, pero, desgraciadamente en los políticos no hay humildad, no hay amor al prójimo, solo hay ambición de poder, solo hay deseo de tener más dinero, de tener más negocios, de hacer más grande su cuenta bancaria”.
“Entonces, si usted quiere hacer algo por esta patria, ore y quédese en su casa el próximo domingo, venga a la Eucaristía y ofrézcala por Nicaragua, porque nosotros tenemos la esperanza, hermanos, que este país no va a terminar mal, recuérdense que dice el dicho: ‘No hay mal que dure cien años ni cuerpo que lo resista’. Yo creo que nosotros llevamos ya muchos años de sufrimiento y este pueblo ya no aguanta tanta pobreza y tanta miseria que nos tienen metidos esta gente que gobierna el país”, finalizó el padre Vicente.
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