María Esperanza Sanchez y Víctor Manuel Soza Herrera, los matagalpinos considerados presos políticos, no serán llevados a la audiencia “oral y pública” del proceso de apelación contra la sentencia que los condenó, en mayo pasado, por supuestos delitos relacionados con tráfico de drogas, confirmó el abogado Julio Ariel Montenegro, de los Defensores del Pueblo.
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La audiencia de apelación está prevista para este viernes 25 de septiembre, a las 10:25 a.m., en la Sala Dos del Tribunal de Apelaciones de Managua, confirmó Montenegro, indicando que Sánchez y Soza “no serán llevados a audiencia por disposición judicial”.
La excusa para esa “disposición” de no llevar a los procesados, supuestamente es la pandemia de la Covid-19.
Sánchez García ha sido una activista opositora al régimen de Daniel Ortega y, además de haber participado en marchas y protestas desde abril de 2018, también estuvo apoyando las ferias azul y blanco realizadas por excarcelados políticos en diferentes ocasiones en Matagalpa.
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Tras un juicio que concluyó el 8 de mayo y por sentencia dictada el 13 del mismo mes, la juez Primero de Distrito Penal de Juicios de Managua, Irma Oralya Laguna Cruz condenó a Sánchez y Soza a diez años de prisión y 500 días multa, equivalentes a 31,190 córdobas, por el supuesto tráfico de estupefacientes.
“Lo que esperamos es que la sentencia sea revocada y mi mamá pueda estar libre”, señaló por su parte Sherly Sanchez, hija de Sánchez García.
La pretensión en la apelación, según el abogado Montenegro, es la revocación de la sentencia condenatoria, porque “son hechos prefabricados, son detenidos y después aparece que cometen delitos”.
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En el proceso de apelación, “el cuestionamiento es el mismo, hablamos que (Sánchez y Soza) fueron detenidos en distintos lugares”, señaló Montenegro.
La acusación de la Fiscalía señala que el supuesto delito fue cometido el 27 de enero de este año en el kilómetro 10.2 de la carretera a Masaya; sin embargo, el abogado Montenegro y los familiares de ambos procesados sostienen que Soza fue detenido a las 2:45 p.m. del domingo 26 de enero cerca del parque Francisco Morazán, al centro de la ciudad de Matagalpa. Ese parque está frente a la delegación departamental de la Policía. En tanto, Sánchez fue detenida la noche del 26 de enero cerca de una “casa de seguridad” en el kilómetro 10.5 de la carretera a Masaya.
Además, según Montenegro, los testigos “fueron incoherentes, contradictorios entre sí”.
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