El sacerdote Ramiro Tijerino, de la Parroquia Nuestra Señora de Guadalupe en Matagalpa, ha sido nominado como el nuevo juez en la causa de canonización de Fray Odorico D’Andrea, el sacerdote de origen italiano que hizo abrazarse a ejércitos en guerra y cuya labor pastoral fue desarrollada principalmente en el municipio de San Rafael del Norte, departamento de Jinotega.
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“Privilegiado, porque es una experiencia muy particular que no se suele dar porque estos procesos de canonización no son a cada momento y poder participar en este juicio, lo llena a uno de mucha satisfacción, porque uno puede colaborar con la hermana Diócesis de Jinotega y con la Provincia Eclesiástica de Nicaragua, porque, en definitiva, el Padre Odorico ya es considerado santo por el pueblo”, comentó el sacerdote Tijerino, confirmando su nombramiento.
El juez de la causa del Padre Odorico era el padre Jaime Valdivia Pinell, un monge sacerdote, fundador del Monasterio Albertiniano Inmaculada Concepción de María en la Diócsis de Estelí, quien falleció el 31 de julio recién pasado, tras haber sido afectado por la Covid-19.
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“Fray Odorico ha dejado huellas y trazos de su santidad en los corazones de los san rafaelinos, jinoteganos y matagalpinos que le conocieron”, insistió el padre Tijerino.
José D’Andrea Valeri era el nombre de pila del Padre Odorico, nacido el 5 de marzo de 1916 en la ciudad italiana de Montorio al Vomano. El 26 de agosto de 1953 llegó a Nicaragua, estableciéndose en el Convento de la Orden Franciscana Menor, contiguo al actual templo San José de la Parroquia Inmaculado Corazón de María en Matagalpa.
Meses después, el 20 de febrero de 1954, Fray Odorico llegó a San Rafael del Norte, quedándose ahí hasta que enfermó el 20 de marzo de 1990, cuando fue llevado al Convento en Matagalpa, donde recibió asistencia médica. Ahí murió al mediodía del 22 de marzo y al día siguiente sus restos fueron llevados nuevamente a San Rafael del Norte, donde sus funerales fueron el 26 de marzo en una de sus más importantes obras: la iglesia de El Tepeyac.
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En octubre de 2002, fue publicado el decreto que inició la causa de Beatificación y el 17 de octubre de 2006 fueron exhumados sus restos, encontrando su cuerpo incorrupto.
De acuerdo con el padre Tijerino, el proceso diocesano continúa recopilando información de testigos, aunque el Padre Valdivia, junto a monseñor Eliar Pineda, procurador de la causa, el postulador, que es Fray Damián Muratori, así como las comisiones de trabajo, han avanzado bastante, por lo que esperan poder remitir pronto toda la documentación a El Vaticano.
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