Olivia López llegó la mañana de este martes 28 de julio a una tienda en Matagalpa; pero, en la puerta, un vigilante con termómetro digital le tomó la temperatura, al instante le aplicó alcohol gel en las manos y además se aseguró de que la mujer desinfectara sus zapatos en una alfombra con cloro y que entrara con mascarilla. Así es el protocolo adoptado por diversos negocios en esa ciudad norteña, para prevenir el contagio de la Covid-19.
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Belmis Sáenz, dueña del establecimiento al que llegó López, asegura que son medidas que deben practicar con todos los clientes de su tienda; aunque señala que “hemos tenido mucho rechazo, porque muchos dicen que somos muy estrictos, que somos locos, pero ni modo, eso es porque cuidamos a los trabajadores y cuidamos a las personas que entran a la tienda también”
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López por su parte, valoró como positivas las medidas de prevención en la tienda y en otros negocios a los que ha ido, aunque admite que “nos ha costado” la adaptación a la nueva realidad que ha impuesto el coronavirus.
Entregas a domicilio
Mientras tanto, la comerciante Sheyla Jiménez comentó que en su tienda ha tenido que implementar distintas medidas, incluyendo la reducción del horario de atención, además de aplicar las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
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“Es realmente un poco cansado”, explicó Jiménez, “porque ahora el tiempo de limpieza es más extenso en la tienda y tenemos muchísimo más cuidado con ello”.
De acuerdo con Jiménez, una de sus estrategias de venta es promocionar su mercadería a través de redes sociales y ofrecer el servicio de envíos a domicilio.
Katherine Umanzor trabaja en otro de los negocios y admite que el proceso de insistir en medidas preventivas ha sido “un poco difícil”, pero las aplican con cada cliente que llega al establecimiento.
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