
El gubernamental Instituto Nacional Penitenciario (INP) dio a conocer en un comunicado que en el enfrentamiento se reportaron «17 (fallecidos) dentro de las instalaciones del penal y uno en el hospital de la región» pero solo reveló una lista con los nombres de 14 muertos y 16 heridos.
La portavoz del INP, Digna Aguilar, dijo a la agencia de noticias AFP que se registró «una riña entre los privados de libertad porque se les decomisaron las armas».
Aguilar añadió que las investigaciones se atrasaron porque las autoridades tardaron en ingresar al penal «por temor a ser parte de las víctimas» ya que varios reos portaban armas de fuego. La portavoz también informó la suspensión de su cargo del director de la prisión.
La Fuerza de Seguridad Interinstitucional Nacional (Fusina) declaró en un comunicado que decomisaron a los reos cinco pistolas 9 mm y dos cargadores de municiones.
Las autoridades de Medicina Forense sacaron los cadáveres en bolsas de plástico y los transportaron a la morgue judicial de San Pedro Sula para practicarles las autopsias.
Inmediatamente después de que se revelaron los nombres de los fallecidos, sus familiares conmocionados llegaron a reclamar los cuerpos, según observó un fotógrafo de la AFP en el lugar.
Emergencia carcelaria
A raíz de una cadena de asesinatos, el presidente Juan Orlando Hernández declaró una emergencia el martes en los 27 centros penales, que alojan a más de 21,000 reos, lo que implica pasar el control absoluto de las cárceles a las Fuerzas Armadas y la policía.
La gota que colmó el vaso para declarar la emergencia fue el asesinato de cinco miembros de la pandilla Mara Salvatrucha (MS-13) a manos de otro pandillero el pasado 14 de diciembre en la cárcel de máxima seguridad de La Tolva, a unas 25 millas (40 kms) al este de la capital.
El pasado 13 de diciembre mataron a tiros en el sur del país a Pedro Idelfonso Armas, director de la principal cárcel de máxima seguridad de El Pozo I, en Santa Bárbara, al oeste del país.
Armas había sido suspendido del cargo mientras el Ministerio de Seguridad lo investigaba por haber presenciado cómo unos reos mataban el pasado 26 de octubre a Magdaleno Meza, exsocio confeso del exdiputado Juan Antonio «Tony» Hernández.
Armas estaba conversando con Meza cuando guardias del penal abrieron un portón, lo que permitió que una docena de reos entraran y le dispararan a quemarropa, según un video que circuló por redes sociales.
Tony Hernández, hermano del presidente Juan Orlando Hernández, fue condenado por cuatro delitos de narcotráfico en una corte de Nueva York.
El presidente Juan Orlando Hernández inauguró en octubre una cárcel de máxima seguridad, para albergar a los pandilleros presos, que -reconoció el mandatario- ordenan crímenes desde las prisiones.
Univision
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