Miembros del Movimiento 19 de abril en Sébaco, Matagalpa, liberaron la tarde de este miércoles al profesor de Lengua y Literatura del Instituto Nacional Eddy Alonso, Jarvin Urrutia, quien pasó retenido unas horas 20 horas en el tranque ubicado en el puente sobre la carretera Panamericana en esa ciudad.
Según los autoconvocados, Urrutia tenía una “actitud sospechosa” y presuntamente envió mensajes a la delegada municipal del Ministerio de Educación diciendo que en el tranque “los que estaban eran unos delincuentes”. Además, señalaron que a algunos les han tomado fotos para luego ir a sus casas a amenazar a sus familias.
El profesor fue liberado por la mediación de los seis sacerdotes de Sébaco con el apoyo del párroco del vecino municipio de San Isidro, monseñor Edgard Sacasa y en presencia de Omar Castellón, coordinador del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), en Matagalpa.
Cuando el profesor fue retenido, surgió una campaña de desprestigio contra los sacerdotes de Sébaco, principalmente contra los presbíteros Jairo Pravia y Marlon Velásquez. Además, acusaban a los manifestantes de haber secuestrado y torturado al profesor.
Urrutia desmintió esta versión al ser liberado. “En ningún momento me sentí secuestrado ni encarcelado… los muchachos ninguno me ofendió, nadie me golpeó ni me maltrató, solo me hicieron dos o tres preguntas, les di el teléfono y me dieron todas las comodidades”, dijo Urrutia, agregando que “Nicaragua necesita paz”.
También expresó que en la situación que atraviesa el país “todos somos sospechosos y los jóvenes que me llamaron están haciendo su trabajo, porque constitucionalmente la protesta es válida en cualquier parte del mundo”.
El padre Velásquez exhortó a los pobladores de Sébaco a evitar las campañas de desprestigio contra la Iglesia y el clero.
Una madre de tres estudiantes quienes se encuentran protestando, aprovechó cuando liberaron al profesor y denunció que este martes su casa la agarraron a balazos, pero no dijo quiénes lo hicieron.
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