Iniciaba el cuarto episodio del tercer partido de la serie entre Indígenas de Matagalpa y Costa Caribe , el domingo 25 de marzo reciente, en el estadio Glorias Costeñas de la ciudad de Bluefields. Un batazo de Rommel Mendoza golpeó en el peroné a Lurgen Rayo, abridor de los Flecheros, quien tuvo que abandonar el desafío.
La Tribu septentrional estaba al frente 3×0 en el marcador. Lurgen estaba haciendo un gran trabajo desde la lomita. En tres entradas completas solo admitió dos imparables, incluyendo el batazo de Mendoza que lo sacó de juego.
“Yo quería continuar. Ganarle a la Costa en su terreno siempre ha sido algo tremendo, pero el dolor era fuerte y no podía poner bien el pie. Entonces el manager Ramiro Toruño me dijo que estaba bien y que no me quería perder toda la liga por un juego”, relató Lurgen, quien está recuperándose de la lesión.
“Me siento ya mucho mejor, con algo de dolor, pero hoy fui a correr y pienso que en la próxima serie ya estaría listo, porque además estoy con medicamentos”, explicó el joven lanzador que este año lleva dos triunfos y un revés en cuatro inicios con los Indígenas.
En 20 entradas y un tercio, Lurgen admite siete carreras, todas limpias, para una efectividad de 3.10, con 11 ponches y solo cinco boletos regalados, para un promedio WHIP (Bases por bolas y hits por innings lanzados) de 0.84.
La mejoría y consistencia de Lurgen ha sido notoria desde la recta final de la temporada 2017, siendo incidente en partidos claves para el avance de los Indígenas a la ronda de playoffs y semifinales.
“He cambiado mi mecánica de lanzar. Ahora tiro un poco más lateral. Cambié mi curva por un slider, comencé a tirar pegado con mucho sinker y sobre todo he cambiado la mentalidad, poniendo todo en las manos de Dios”, comentó Lurgen.
Carlos Dariel, incentivo extra
Un incentivo adicional es el impresionante inicio que ha tenido su hermano menor, Carlos Dariel, quien en cinco relevos ha finalizado y salvado cuatro juegos con una macabra frecuencia ponchadora.
Carlos Dariel ha fusilado a 16 contrarios en 9.1 entradas lanzadas y solo permite una carrera sucia, por cuanto su efectividad se mantiene impecable en 0.00.
Lurgen dice que “antes, cuando mi hermano entraba a lanzar, honestamente me llenaba de nervios y estaba siempre a la expectativa de cómo iba a salir, pero ahora puedo decirte que me deleito con sus apariciones y siempre trato de apoyarlo en lo más que pueda”.
Agrega que: “siempre bromeo con él y nos ponemos a competir en el buen plan. Tratamos de hacer siempre el mejor trabajo ambos, nos preparamos iguales… y la verdad es que me motiva, me alegra y me emociona verlo así, porque la verdad es que ha iniciado muy bien y siempre procuro estar motivándolo y haciéndole ver las cosas buenas y malas”.
Según el mayor de los hermanos Rayo Treminio, la comunicación entre ambos trasciende a los consejos recíprocos sobre la mecánica y el tipo de picheos a realizar.
Ser el mayor no significa autoritarismo. “Siempre respeto su opinión porque sé que lo que él me dice es para bien y le hago caso y he visto resultados. Una cosa que él me dijo es que usara más el cambio y ese picheo me ha sido útil y ahora estoy usando básicamente cuatro picheos”, sostuvo Lurgen.
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