Al menos dos hombres, uno de ellos con vestimenta tipo uniforme policial, habrían asesinado a la productora Reyna Gioconda Molina Zamora, de 65 años, y herido de gravedad a cuatro personas más, la noche del reciente domingo 4 de marzo en la comunidad San Nicolás, al suroeste de la ciudad de Matagalpa.
Investigadores policiales continúan indagando la identidad de los asesinos que presuntamente llegaron a la finca Santa Gertrudis —del kilómetro 116.5 de la carretera Matagalpa-Sébaco tres kilómetros al sur—, haciéndose pasar por policías que andaban averiguando sobre un supuesto abigeato.
Los hermanos Marco Aurelio y María Marcela Marenco Molina —hijos de Molina Zamora—, así como Zuleika Vanessa Otero Marín (esposa de Marco) y Douglas Antonio Altamirano González, cuidador de la propiedad, habrían sido heridos de bala y también por arma blanca, por lo que fueron llevados al Hospital Escuela César Amador Molina, en la ciudad de Matagalpa.
“Mi hermana (Marcela) me llamó herida, me dijo que habían matado a mi mamá, que a mi hermano lo habían degollado, a mi cuñada y al muchacho que cuida la finca, dijeron que eran unos hombres vestidos de policías que andaban investigando un abigeato, luego dijeron que era un asalto y les dispararon a ellos”, contó Reyna Karla Marenco Molina, hija de la productora asesinada.
Inicialmente, una fuente vinculada con las indagaciones reportó que Altamirano estaba desaparecido, sin embargo, lo encontraron más noche el mismo domingo al otro lado del río Grande de Matagalpa. Habría querido huir de los asesinos, pero estos le impactaron dos balazos.
“Se quiso correr, pero las fuerzas no le dieron”, comentó Humberto Altamirano, primo de Douglas, indicando que este “tenía más de 20 años trabajando para ellos (familia Marenco Molina) y era como parte de esa familia”.
“Está en riesgo su vida todavía, porque cayó al río y las aguas contaminadas afectaron más las heridas”, dijo Humberto sobre la condición de su primo en el hospital de Matagalpa, donde también siguen internados Marco y Zuleika. En tanto, Marcela tuvo que ser transferida a un hospital de Managua.
La remataron
Reyna Karla cree que los asesinos entraron primero a la pieza de la casa donde estaba su madre, a quien además de dispararle la atacaron con arma blanca para rematarla. “Tenía tres balazos y estaba apuñalada también”, dijo.
Los familiares de las víctimas descartan el robo como posible móvil del crimen porque “ahí todo está intacto, no robaron nada”, señaló Reyna Karla Marenco Molina.
De manera extraoficial, trascendió que una de las hipótesis que trabaja la Policía está relacionada con personas a quienes la familia Marenco Molina había denunciado antes por la pérdida de un ganado de la finca Santa Gertrudis.
Había denunciado amenazas
Desde hace meses Reyna Karla Marenco, hija de Reyna Gioconda Molina Zamora, había denunciado constantemente ante organizaciones defensoras de mujeres su temor a que ella y su familia fuesen víctimas de un hecho criminal.
El temor de Reyna Karla estaba basado en las amenazas recibidas tras el proceso judicial que siguió en contra de su expareja.
El hombre que inicialmente había sido sentenciado a siete años y ocho meses de cárcel en primera instancia, en una apelación logró ser sobreseído y en enero del presente año fue puesto en libertad.
Es por ello que Magaly Quintana, de Católicas por el Derecho a Decidir, considera que el hecho no debe ser investigado como un supuesto intento de robo.
Juanita Jiménez, del Movimiento Autónomo de Mujeres (MAM), también hizo eco de la alerta a través de redes sociales, pues indicó que no descartan “la venganza” detrás del hecho criminal ocurrido el domingo.
A través de su sitio en Facebook, Católicas publicó una denuncia pública dirigida a la vicepresidenta designada por el Consejo Supremo Electoral, Rosario Murillo, y a la magistrada presidente de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), Alba Luz Ramos, bajo la advertencia: “Nicaragua se tiñe de sangre de hermanas, respondan por la masacre de San Nicolás”.
A través de la denuncia expone los mensajes de texto que de forma constante recibió de parte de Reyna Karla Marenco en los que expresaba su temor a ser asesinada.
“Es seguro que quiera matarme”, dice uno de los mensajes de texto dirigido a Católicas.
Sospecha de ex pareja
Reyna Karla Marenco Molina sospecha que su ex pareja, a quien identificó como Pracedes Valverde, puede estar detrás del crimen por cuanto el hombre presuntamente la amenazó antes con que “iba a mandar a matar a mi familia, que me iba a quitar a las (dos) niñas y me iba a matar por último a mí, que yo iba a ver morir a mi familia”.
De acuerdo con registros judiciales, por sentencia del 17 de octubre de 2017, Valverde fue condenado en primera instancia a siete años y ocho meses de prisión por violencia física y violencia sicológica contra Reyna Karla. Pero, por sentencia del 25 de enero de este año, la Sala de lo Penal del Tribunal de Apelaciones de la Circunscripción Norte revocó la primera sentencia y sobreseyó a Valverde, ordenando su libertad.
Que se haga justicia
Los familiares de las víctimas, incluyendo a la ex juez en Jinotega, Adriana Molina Fajardo, sobrina de la productora asesinada, solicitaron el pronto esclarecimiento del caso, señalando su confianza en el trabajo policial.
“Tenemos que esperar a que la Policía haga su trabajo y que haga las investigaciones concernientes para este caso. Sabemos de la eficacia y la eficiencia que la Policía tiene. Sí es un hecho totalmente repudiable, pienso que mi tía y su familia no merecían una crueldad de esta naturaleza, pero también existe la justicia divina y estamos a la espera de la respuesta del Señor y de la respuesta de las autoridades policiales”, dijo Molina Fajardo.
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