Mermas considerables por distintos factores en la reciente cosecha cafetalera, tienen en iliquidez a los caficultores que en los últimos años han lidiado con una serie de males en el departamento de Matagalpa, por lo que temen cerrar o perder sus fincas, lo que conllevaría a despidos masivos de obreros agrícolas.
De momento, el ciclo cosechero 2017-2018 lleva un 98 por ciento de avance en el departamento de Matagalpa, donde los caficultores estiman una disminución del 30 por ciento en la producción respecto del ciclo anterior, lo que sumado a los precios internacionales del café, por debajo de 117 dólares por quintal, los ha sumergido en la iliquidez.
La crisis que enfrenta el sector cafetalero ha repercutido en el incumplimiento de pagos en tiempo y forma con las instituciones financieras, casas comerciales y proveedores en general; además de la falta de atención adecuada a las plantaciones que nuevamente comienzan a ser afectadas por plagas como el “minador”, refirió Joaquín Solórzano Lanzas, presidente de la Asociación de Cafetaleros de Matagalpa (Asocafemat).
Asimismo, la falta de recursos ha provocado el recorte de personal permanente en algunas fincas, coincidieron Víctor Hugo Castillo y Frank Lanzas Monge, también directivos de Asocafemat.
Principal rubro económico
El café representa el principal rubro económico para el departamento de Matagalpa, donde más de 42,000 manzanas son cultivadas con ese rubro y miles de familias dependen de los empleos que genera la caficultura.
Factores como el cambio climático, caída de los precios internacionales, así como la falta de financiamiento oportuno, han sido incidentes en la crisis de la caficultura.
La Asocafemat emitió un pronunciamiento en el que señala afectaciones climáticas durante los últimos tres ciclos productivos como sequías prolongadas en períodos de floración y llenado de frutos, lo que repercute en merma de rendimientos y muerte de plantaciones.
También menciona períodos prolongados de lluvias que durante la maduración del grano provocan la caída de la cosecha; además de granizadas, vientos y lluvias atípicas que solo en el ciclo productivo 2017-2018 provocaron pérdidas que oscilan entre el 30 y 50 por ciento de la producción.
Los caficultores apuntan a “la transformación de la matriz productiva del país y la transición a nuevas variedades tolerantes a la roya, más productivas y manejo técnico adecuado”, según señalan en el documento que leyeron este viernes en rueda de prensa.
Propuestas de los caficultores
Los caficultores reclaman el respaldo estatal y proponen soluciones como reestructuraciones de créditos “sin descalificación de las deudas, con condiciones crediticias de acuerdo a la realidad productiva del rubro café, con plazos de hasta 20 años, con cuatro años de gracia de principal y tasas de interés competitivas”.
También demandan créditos de largo plazo para renovación de plantaciones agotadas con variedades tolerantes a las plagas y enfermedades.
Asimismo, claman por habilitaciones oportunas “para el manejo técnico de las plantaciones, asegurando la generación de empleos, la seguridad alimenticia y la paz social. Los fondos de la habilitación cafetalera deben de asegurar los costos y gastos en el período de cosecha”.
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