Aunque un juez en Matagalpa impuso condenas que suman más de 35 años de prisión, por disposición constitucional serán 30 años —la pena máxima en el país— los que tres hombres deben permanecer presos, luego que fueron declarados culpables de asesinar a cuatro personas en la comunidad El Varillal, del municipio de Waslala, en la Región Autónoma de la Costa Caribe Norte.
La sentencia, dictada por el juez Primero de Distrito Penal de Juicios de Matagalpa, Frank Rodríguez, fue notificada este 10 de enero a Sebastián Castillo Zeas, de 45 años; Francisco Ramos Hernández, de 20, y José Luis Díaz Hernández, de edad no precisada, quienes hasta ahora han sido los únicos procesados por la masacre ocurrida la noche del 14 de octubre de 2017.
Cada uno de los tres procesados fue sentenciado a 30 años de prisión por asesinato agravado y a cinco años y seis meses de prisión por robo agravado. En tanto, Ramos y Díaz fueron condenados también a un año de prisión y 100 días multa por portación ilegal de armas de fuego, delito por el que Castillo Zeas fue declarado no culpable, debido a que un arma que la Policía le ocupó al momento de apresarlo, “la tenía legalmente portada”.
LOS HECHOS
Guillermina Jarquín Ortega, de 51 años; el primo de esta, José María Jarquín Bermúdez, de 29; Melkis García González, de 21, y Valeriano Chavarría Navarrete, de 49, fueron las víctimas de la masacre motivada por una presunta venganza y conflictos por muertes previas entre dos familias.
Por este caso, la Fiscalía acusó a nueve personas, incluyendo a los tres condenados y al presunto autor intelectual de la masacre, identificado como Denis Castillo Reyes, quien sigue huyendo.
Otros acusados y prófugos son René Zeas Siles, apodado Solín y presunto líder del grupo; René Zeas Siles, Santiago Zeas Centeno, Jesús Cortedano, Eliécer Castillo Reyes y José María Zeas Aráuz, alias Chepe Gallina. Este último fue detenido el 29 de noviembre de 2017 y la Policía le ocupó una pistola, pero no ha sido procesado.
VENDETTA
La masacre, según la acusación, habría sido motivada por rencillas entre la familia de Jarquín Ortega y la familia de Denis Castillo Reyes, entre las cuales ya había antecedentes de muertes recíprocas.
Según registros policiales y judiciales, el 1 de abril de 2016, en El Varillal fue asesinado Francisco Castillo —padre de Castillo Reyes— presuntamente por los hermanos Marlon y Nelson Rizo Jarquín, hijos de la asesinada Guillermina Jarquín Ortega.
Castillo, en venganza, mató a Melkin Rizo Jarquín, ya que no halló a los hermanos.
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