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“Iglesia misionera, testigo de misericordia”, es el lema que la Diócesis de Matagalpa mantendrá este año, por lo que el obispo Rolando José Álvarez Lagos invitó a los fieles a incorporarse a una “misión permanente” de evangelización y que ninguna casa de la jurisdicción eclesiástica quede sin ser visitada.
La exhortación del obispo ocurrió en su homilía ante más de 35,000 católicos que asistieron este domingo 15 de enero a las solemnidades religiosas en el Santuario Diocesano de Nuestro Señor de Esquipulas, en el municipio de Esquipulas, Matagalpa.
En su mensaje, monseñor Álvarez insistió en que los católicos “no somos transmisores ni comunicadores de malas noticias”, agregando que “no somos seguidores de una idea, (pero sí) somos seguidores de una persona y este es Cristo vivo y resucitado”, invitando a los asistentes a que, sin dejar de ser discípulos, “seamos también misioneros”.
“Este año, queridísimos hermanos, (vamos) a salir a las calles, a las quebradas, a los barrios, a las comunidades, este año que no quede una sola casa de nuestra Diócesis sin ser visitada, sin ser evangelizada, este año todos a misionar como Iglesia misionera, testigo de misericordia”, exclamó enérgico el obispo ante los miles de fieles que le aplaudieron.
La peregrinación
La mayoría llegó un día antes a Esquipulas, en las multitudinarias peregrinaciones que anualmente parten desde tres puntos diferentes en el departamento: la comunidad El Rodeo, municipio de Muy Muy; el poblado de San Dionisio, cabecera del municipio homónimo y la comunidad El Cacao, municipio de Darío.
Por cada ruta, los peregrinos caminan 18 kilómetros en promedio. Aunque algunos llegan antes a la pequeña ciudad de Esquipulas para visitar el Santuario.
Algunos lugareños improvisan pequeños negocios, principalmente expendio de alimentos, para atender, cada año, a la creciente cantidad de visitantes que supera en cuatro veces a la población total de la ciudad y que duplica el total de pobladores del municipio.
Las ventas de chancho con yuca, enchiladas, refrescos, agua, “han sido buenas” el fin de semana que estuvieron los peregrinos, comentó Josué Jarquín, quien atendía en un quiosco en el parque frente a la entrada al Santuario.
Isidro Hernández Cruz, en tanto, llegó de Managua junto a otros buhoneros para vender rosarios, llaveros con imágenes del Divino Niño y del Señor de Esquipulas, entre otros artículos religiosos. “Siempre se vende algo, por lo menos para la comida”, dijo.
Asimismo, en la ciudad hay quienes alquilan el uso de letrinas o servicios higiénicos y “el que tiene baños así hace buen billete, algunos ponen su ventecita, pero es mayor la cantidad de gente que viene a hacer negocios aquí”, comentó José Onofre Espinoza, habitante de Esquipulas.
Espinoza es comerciante en el mercado local, pero cerró el negocio durante el fin de semana porque las ventas las acaparan quienes se instalan en las inmediaciones del Santuario.
Sin incidentes
Para brindar la seguridad, la Policía triplicó la cantidad de agentes, incluyendo a los policías voluntarios, que generalmente mantiene en el municipio y envió a más de 70 policías desde la unidad departamental, sin incluir a los agentes que se mantuvieron en retenes en distintos tramos de carreteras.
Miembros del Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Matagalpa (CBVM) y de la ciudad de San Ramón, así como personal del Ministerio de Salud y miembros de Cruz Roja, también brindaron cobertura a los festejos religiosos. Ninguna de esas instituciones reportó incidentes.
“Hemos brindado cobertura a la peregrinación que salió de San Dionisio y solo brindamos algunas atenciones por insolación, estuvimos repartiendo agua, pero no tuvimos ningún tipo de incidentes mayores”, declaró el mayor Juan Ramón Rodríguez, del CBVM.
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