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Elízabeth Romero, LA PRENSA, 30 de marzo de 2016
Versiones contradictorias circulaban este martes 29 de marzo en el sector de Jinotega, alrededor de un enfrentamiento armado, con saldo sangriento ocurrido el lunes, en una zona montañosa de Ayapal, Jinotega.
El Ejército de Nicaragua informó a través de una nota de prensa que el choque armado había provocado la muerte de seis “delincuentes”, a quienes acusan de dedicarse al cultivo y tráfico de marihuana.
La versión oficial refiere que el hecho ocurrió el lunes cuando pequeñas unidades del Sexto Comando Militar Regional realizaban patrullajes en sectores de Cerro Sibiwas, a 25 kilómetros al noreste de Ayapal, departamento de Jinotega. Y en esta acción resultaron dos militares heridos, “quienes se recuperan satisfactoriamente”.
Un informante indicó a LA PRENSA que en la zona se asegura que entre los heridos está el jefe del batallón ubicado en Ayapal.
El intercambio de disparos dejó como resultado la muerte de seis sospechosos, “hasta el momento de identidad desconocida”, expresa la versión de la institución militar.
A los atacantes los soldados les ocuparon, según la versión oficial, cinco escopetas y municiones de diferente calibre, “así como una cantidad importante de marihuana”.
Las versiones extraoficiales disienten del informe oficial. Hay quienes aseguran que el número de bajas corresponde al Ejército, otros sostienen que los lugareños vieron cuando el Ejército subió a un helicóptero a dos de sus soldados muertos y uno herido, mientras dejaban en el lugar los cuerpos sin vida de los irregulares.
“Ellos (los del Ejército) siempre dicen las cosas al revés”, dijo un habitante de Ayapal, quien solicitó no ser identificado por temor a represalias.
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Una información similar ha trascendido hasta Jinotega, dice Byron Chamorro, presidente departamental del PLI en Jinotega.
“Lo que la gente dice es que son seis del Ejército y dos armados… esa es la única información que yo tengo”, indicó Chamorro, quien explicó que prefiere esperar a que baje gente de las comunidades hoy miércoles, para conocer mayores detalles de lo que en realidad sucedió en esa lejana comunidad.
Según la nota del Ejército, los soldados fueron atacados “por varios delincuentes” que efectuaron disparos con escopetas. Al tiempo que señala que desde el mes de febrero pasado le dan “seguimiento operativo a delincuentes que se dedican al cultivo y tráfico de marihuana en los sectores fronterizos entre Honduras y Nicaragua”.
Otras fuentes locales indican que el enfrentamiento duró más de dos horas y que el grupo que se enfrentó a las fuerzas del Ejército estaba al mando del cabecilla identificado únicamente como Walter.
“Las cosas no están bien en Ayapal”, afirmó uno de los informantes, quien aceptó hablar bajo el anonimato, por temor.
La inestabilidad en la zona de Ayapal lleva varios meses pero, según sus pobladores, se profundizó hace más de dos meses, cuando un grupo armado incursionó en la comunidad de Pueblo Amado, al otro lado del río Ayapal, y que ha motivado el abandono de unas sesenta escuelas por parte de sus maestros.
SUSPENDIERON CLASES
A eso de las 10:00 a.m. del martes 29 de marzo, los estudiantes de secundaria en Ayapal fueron sacados de urgencia y sin ninguna explicación por parte de los educadores. Según uno de los informantes, la suspensión de las clases fue motivada por una advertencia de “los del monte” de que llegarían hasta el casco urbano de Ayapal.
El lunes por la tarde el delegado del Ministerio de Educación junto con el jefe de la Policía local se habían reunido con los maestros a quienes les dijeron que “o dan clases o pongan la renuncia”.
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