El Papa culmina su gira por México visitando Ciudad Juárez. Crédito: AFP
La última jornada del papa Francisco en México, en una gira de seis días que inició tras su arribo a tierras aztecas el pasado 12 de febrero, tendrá varios momentos importantes cuando visite una cárcel en Ciudad Juárez, y luego se dirija hasta la frontera con Estados Unidos, una zona donde miles de migrantes intentan cruzar cada año.
El Sumo Pontífice abandonará la Nunciatura Apostólica en la Ciudad de México, donde se albergó desde su llegada al país latinoamericano, y tomará un vuelo a las 8:35 hora local (14.35 GMT) rumbo a Juárez, adonde se espera que llegue una hora y media después.
La primera escala del Papa será en cuando visite el Centro de Readaptación Social Estatal 3, a las 10:30 hora local (16:30 GMT), donde se reunirá con reos a quienes les brindará un mensaje de esperanza y perdón.
El líder de la Iglesia Católica realiza visitas a prisiones en casi todos sus viajes al extranjero, algo que forma parte de su antigua costumbre de atender a los presos, en su creencia de que lo más bajo de la sociedad merece dignidad.
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En la penitenciaría mixta donde lo esperan 600 reclusos hombres, 100 mujeres, 250 familiares de internos, 50 miembros de la pastoral penitenciaria y 50 más de la fiscalía responsable de las penitenciarías de Chihuahua, el Sumo Pontífice dialogará con los internos y luego celebrará una eucaristía.
No hace mucho tiempo, Ciudad Juárez estaba considerada como la capital mundial del asesinato, ya que la guerra entre cárteles del narcotráfico elevó la tasa de homicidio a 230 por cada 100.000 habitantes en 2010.
A su vez, los femicidios crecieron exponencialmente, una ola de asesinatos de mujeres que atrajo la atención internacional.
En los últimos años la tasa ha bajado, sin embargo en 2015 todavía se registraban unos 20 homicidios por cada 100.000 personas, más cerca de la media nacional mexicana de 14 por cada 100.000.
Luego de su visita a la prisión, el Papa se dirigirá después al Colegio de Bachilleres donde mantendrá un encuentro en un estadio con 3.650 personas.
Allí les hablará a trabajadores y grupos activistas donde se espera que haga hincapié en la pobreza y la desigualdad.
La gran mayoría de los presentes serán empleados de las maquiladoras (empresas manufactureras), una industria que ofrece trabajo a unas 270.000 personas en esa población.
Por último, Francisco se dirigirá hacia la Feria de Ciudad Juárez, una zona limítrofe con El Paso, Texas, Estados Unidos.
Allí, el Sumo Pontífice dará una misa a las 16:00 hora local (22:00 GMT), en el que se espera que haya una importante concurrencia de miles de migrantes y representantes de otros grupos vulnerables, como familiares de desaparecidos o de víctimas de femicidios.
Antes de la ceremonia, Francisco rezará frente al Río Bravo, que divide a México y Estados Unidos, a los pies de una cruz y acompañado de unos viejos zapatos y sandalias que simbolizan el drama de la migración.
Según afirmó el padre Javier Calvillo, director de la Casa del Migrante de Ciudad Juárez, el pontífice «hará un momento del reflexión, se parará, dejará una ofrenda» y todo el tiempo permanecerá «rodeado de muchos zapatos, huaraches (sandalias) que los migrantes dejan aquí, bajará y se irá a celebrar la santa misa».
Finalizada la misa, el Papa iniciará su despedida de México, donde se llevará a cabo una ceremonia en el aeropuerto internacional de Ciudad Juárez, con la presencia del presidente mexicano, Enrique Peña Nieto. Tras el acto protocolar, se subirá al avión que lo llevará de regreso a Roma.
Fuente: Infobae
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