Por causas aún indeterminadas un bus de transporte colectivo que cubre la ruta Jinotega-Managua, placas M1449, se precipitó a una alcantarilla en el empalme de carreteras en la comunidad El Guayacán, diez kilómetros al suroeste de la ciudad de Matagalpa, sobre la vía a Sébaco. Al menos dos mujeres y tres hombres murieron y otras 44 personas, de diferentes edades, sufrieron lesiones en el accidente ocurrido a las 2:20 p.m. de este jueves 21 de enero.
Entre los fallecidos las autoridades policiales solo habían identificado a José Ernesto López López, de 66 años y con domicilio en la Colonia Nicarao de Managua; así como a Douglas Torres Torres, de aproximadamente 60 años y con domicilio impreciso.
Presuntamente también habría fallecido Dominga Altamirano Zelaya, de 56, originaria de Santa María de Pantasma, Jinotega.
Mientras que Pedro García Urbina, de 45 años y conductor del bus, así como el cobrador de la unidad de transporte, Rodolfo Mendoza Rivas, de 35, sufrieron lesiones de consideración.
Algunos sobrevivientes del accidente presumen que el bus presentó fallas en el sistema de frenos mientras descendía la pendiente pavimentada, sin poder controlar la unidad, que al llegar al “tope” en la intersección con la carretera Sébaco-Matagalpa, impactó contra una valla metálica y terminó al fondo del cauce de unos cinco metros de profundidad.
Cristopher Ruiz, uno de los pasajeros, sufrió lesiones leves en el cuero cabelludo y mientras recibía atención de primeros auxilios de parte de miembros de la Cruz Roja comentó que “traía el número 47, pero ya venía de pie… no tenía mucha visibilidad… solo que los buses siempre bajan la velocidad cuando llegan al beneficio de allá arriba (en la comunidad Las Mesas) y este no bajó la velocidad y venía cada vez más rápido”.
“Fue tan rápido que nadie pudo hablar o algo”, dijo Ruiz, indicando que tras el impacto del bus con la valla “los pasajeros caímos unos encima de otros” y luego optaron por salir por un hueco en la parte superior de la unidad de transporte.
Los heridos fueron llevados al Hospital César Amador Molina de la ciudad de Matagalpa en más de media docena de ambulancias, así como en patrullas policiales y vehículos particulares.
Miembros del Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Matagalpa también atendieron la emergencia, pues el bus estuvo a punto de tomar fuego, refirieron algunos testigos en el sitio.
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El comisionado Omar Martínez, jefe de la Dirección de Seguridad de Tránsito de la Policía en Matagalpa, dijo que aún estaban indagando cuál fue la causa real del accidente.
“Vamos a verificar, porque la información preliminar que nos dan algunos pasajeros es que no funcionaron los frenos, pero estamos sacando el bus (de la alcantarilla) y vamos a hacer los peritajes que nos digan si realmente esa fue la causa, porque no sabemos si fue exceso de velocidad o por desperfectos mecánicos”, dijo Martínez.
Parte de los heridos también fue trasladada hacia el hospital de Jinotega, Victoria Motta.
Los jinoteganos se reunieron a la entrada del Hospital Victoria Motta para buscar a familiares heridos en el accidente. Se espera que trasladen a 12 personas más, de las cuales 8 ya están ingresadas en el centro. El estrés por atender a los heridos se observó en la actitud de los enfermeros y algunas trabajadoras del centro, quienes al ver a tanta gente amenazaron con llamar a la Policía.
HACIA MANAGUA
En declaraciones a medios oficialistas el alcalde de Matagalpa, Sadrach Zeledón, indicó que se movilizaron más de seis ambulancias hacia el lugar del accidente y se reforzó con diez médicos y diez enfermeras el hospital regional de Matagalpa. Indicó que cuatro de los lesionados fueron trasladados hacia Managua. Extraoficialmente se conoció que dos de estos son: Sofía Espinoza Ortiz, de 63 años, y José Ordóñez Bolaños, de 50 años.
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