Las autoridades del califato iniciaron una investigación secreta y sentenciaron al supuesto responsable de introducir el virus. Un alto comandante en riesgo por violar a una joven yazidí que fue infectada
Uno de los sitios de información sobre la constante amenaza contra los Derechos Humanos en los territorios sirios dominados por el Estado Islámico (ISIS por sus siglas en inglés) asegura que las autoridades del califato están muy preocupadas por la propagación del virus del sida entre sus milicianos.
Un reportero del sitio Sound and Picture se desplazó hasta Shaddadi, al sur de Hasaka, para investigar el tema y encontró una fuente que reveló cómo se produjo el contagio.
Un donante de sangre habría iniciado la cadena de infectados
Se contactó con un miembro de ISIS al que identificó con el alias «Abu Qatada». Esta fuente le confirmó la existencia de focos de infección de sida en las filas yihadistas: «En un principio descubrimos el caso de un inmigrante que llegó con nacionalidad indonesia y se puso a donar sangre para los heridos en uno de los hospitales de ISIS», relató.
«El servicio de seguridad del Estado Islámico abrió una investigación. Más tarde se enteraron de que este miembro había infectado a una mujer yazidí que luego vendió a otro yihadista, un egipcio. Cuando examinaron a éste vieron que estaba infectado, al igual que la joven yazidí», relató la fuente de Sound and Picture.
La investigación de Sound and Picture fue en Hasaka y Al Mayadin
Según la versión de Abu Qatada, el indonesio sabía que era portador, se había realizado pruebas en su país antes de viajar a Siria y llegó a territorio de ISIS en 2014. Fue sentenciado a muerte por las autoridades de los yihadistas.
El laboratorio de análisis en el que se hicieron los test está en Almayadeen. El sitio de noticias sirio no ha revelado su nombre, pero relata que un doctor que trabaja en el lugar explicó que el centro de salud «no contaba con elementos para realizar test de HIV».
Sin embargo, ISIS proveyó los equipos necesarios tanto a esta ciudad como a otras de Siria y también de Irak, atento a evitar la propagación.
«Miembros de ISIS fueron enviados al laboratorio para hacerse estudios. Uno de 30 años que hablaba un dialecto egipcio, junto a una joven e 15 años que estaba muy abatida y pálida. Los resultados de ambos fueron positivos», confirmó el médico.
«Miembros de ISIS fueron enviados para hacerse estudios. Dos dieron positivo»
Abu Qatada señaló también que las seis personas que se sabe que visitaban la casa donde vivía cautiva la joven esclava fueron aisladas y se les practicaron pruebas. Al menos dos de ellos dieron resultados también positivos. «Se trataba de dos sauditas que habían tenido sexo con la chica yazidí», explicó.
La investigación oficial podría haber sido revelada con la ejecución como corolario para aleccionar a su forzados súbditos y complacer a quienes apoyan el régimen de Abu Bakar al Baghdadi, pero un dato extra detuvo la iniciativa: apareció un comandante de las altas esferas en el grupo de riesgo.
El «emir» en cuestión estaba entre las personas que visitaban la casa donde esclavizaban a la joven yazidí, pero las fuentes no han podido confirmar si sus violaciones a la joven fueron antes o después de que esta fuera contagiada.
FUENTE: INFOBAE
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